Monografias.com > Sin categoría
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

La república conservadora (página 2)




Enviado por Laura �vila



Partes: 1, 2

En esos tiempos, el Kremlin decidió que el fascismo era un
enemigo más inmediato que el capitalismo y
comenzó su búsqueda de una alianza con todas las
fuerzas democráticas, socialistas y comunistas en contra
del mismo. Y, cuando disueltas las Cortes, anunció Portela
las nuevas elecciones, a la semana siguiente, se consolida el
Frente Popular
, con el pacto del 15 de enero. La Izquierda
Republicana (Azaña), la Unión Republicana
(Martínez Barrio), la Ezquerra catalana y los partidos
Socialista y Comunista, formaron una alianza electoral con un
programa mínimo, pidiendo el retorno a la
política
religiosa, educativa y regional del primer bienio, una reforma
agraria más rápida y una amnistía para
los 30.000 presos políticos. Se convino, en que el
gobierno
estuviera compuesto solo de republicanos, mientras que los
socialistas y comunistas los apoyaban con el propósito de
alcanzar el anunciado programa
"democrático burgués". Esta
decisión fue una concesión al ala revolucionaria,
ya que en esta época, los jóvenes socialistas se
consideraban más avanzados que los comunistas.

Las principales personalidades de esta campaña fueron
Azaña y Largo Caballero, pero pese a sus profundas
diferencias (demócrata representativo y reformador no
revolucionario, el primero; y socialista revolucionario, el
segundo), el Frente popular se mantuvo unido por el proyecto de
amnistía, y el temor al avance fascista.

En cambio, las
derechas no pudieron salvar el abismo que había entre los
socialcatólicos y los carlistas y monárquicos,
aunque en la mayoría de los casos, estaban de acuerdo en
apoyar un candidato único para no suicidarse
políticamente.

Gil Robles basó su campaña en el programa social
católico de la CEDA, preparado para aceptar y gobernar a
la Republica. Pero la Iglesia se dividió en, al
menos cinco facciones. Cuando llegó la hora de las
elecciones, el presidente y su jefe de gobierno, Portela, se
hallaron incapaces de formar un centro fuerte, aunque este
último, presidió la campaña electoral
dignamente: levantó toda censura y evitó emplear la
represión policial, pese al riesgo de
violencia
vigente.

Cuando las Juntas Electorales dieron a conocer las cifras
oficiales, el Frente Popular había obtenido suficientes
escaños para convertirse en mayoría absoluta. Los
partidos reconocieron la victoria de la izquierda, los
principales dirigentes de la CEDA y los monárquicos se
hicieron cargo de su derrota públicamente.

Esta victoria de la izquierda, aterró tanto al Gobierno
como a las derechas derrotadas. Se habla de dos versiones
conspirativas, en una de ellas, estas últimas
habrían incitado al general Franco a dar un golpe (de
estilo latinoamericano), que por varias razones, él mismo
había rehusado. Por otra parte, se afirma que el mismo
Franco, ofreció sus servicios a
Portela con el fin de anular las elecciones, pero que éste
y el presidente Alcalá Zamora, decidieron respetar la
voluntad popular. Sea cual fuere la verdad oficiales leales
advirtieron a Portela, que otros oficiales reaccionarios
pedían la anulación electoral. Portela estaba
aterrorizado y se negó a continuar en el cargo un
día más; entonces Alcalá Zamora,
convocó a Azaña para que asumiera el poder, en
semejante situación de inestabilidad política.

Lo primero que hizo Azaña al asumir el gobierno fue
nombrar un gabinete de hombres de su confianza (Masquelet,
Salvador, Domingo, Ruiz Funes, etc.) y dejar libres a presos
políticos. Se suspendieron las rentas en Andalucía
y Extremadura como primer paso a la distribución de tierras y se
reestablecieron los ayuntamientos socialistas suspendidos desde
el 1934.

En Madrid y las
grandes ciudades industriales cada semana tenían lugar
grandes desfiles exigiendo el dominio del
proletariado e incluso se trazaban paralelismos entre la Rusia de 1917
y la España de
1936, Azaña pidió que cesaran los desfiles de
victoria, estos desembocaban en intentos de asesinato de
funcionarios públicos, incendios de
iglesias, enfrentamientos entre los izquierdistas y fuerzas
armadas (estas desembocaban en matanzas).

En los meses de primavera hubo docenas de tiroteos y
lanzamientos de bombas aunque no
hay certeza de cada hecho ni detalles porque la censura de la
prensa sumada
a la incapacidad policial de controlar la situación no
permitían saber que era lo que pasaba, los movimientos
paramilitares generaron constantes olas de violencia callejera,
las patrullas motorizadas antimarxistas disparaban al azar contra
"los rojos", la violencia no obedecía a ninguna lógica.

Hacia finales de marzo de 1936 las cortes no habían
podido iniciar sus actividades legislativas, y la comisión
encargada de revisar los comicios entró en conflicto, por
lo tanto los problemas de
orden público y la legitimidad de las elecciones
debió ser postergada. El 4 de abril Azaña
presentó su proyecto en el que proponía una
profunda reforma agraria, construcción de escuelas, mayor
autonomía de los ayuntamientos, estatuto de
autonomía para las provincias vascongadas y la
readmisión de todos los trabajadores despedidos por sus
actividades políticas.
La derecha moderada aceptaba tales términos y pedía
también que se pospusiesen las elecciones municipales
convocadas para la segunda semana de abril porque en el estado de
turbulencia pública unas elecciones libres serían
imposibles.

Tres días después, las Cortes depusieron al
presidente de Alcalá-Zamora. El presidente le
ofreció la presidencia del Consejo a muchas personas
diferentes. La Constitución disponía que el
presidente podía disolver las cortes dos veces pero los
redactores de la misma añadieron la cláusula en la
que luego de la segunda disolución las nuevas Cortes
podían examinar las razones del presidente, y si eran poco
satisfactorias el presidente sería automáticamente
destituido.

Martínez Barrio, presidente de las Cortes, se
convirtió temporalmente en presidente de la
República de acuerdo con la Constitución.

Calvo Sotelo denunció a Largo Caballero de intentar
instaurar un sistema comunista
en España. Gil Robles habló más
moderadamente y condenó la violencia
social y a aquellas organizaciones
que respondían a la violencia con más violencia.
Hacia el final de abril y después de varios vaivenes se
consideraba a Azaña el nuevo presidente.

Azaña era la opción más firme del frente
popular porque era capaz de mantener un gobierno moderado, lo
cual mantendría el apoyo de la derecha, pero si bien Largo
Caballero prestó su apoyo, no aseguró cuanto
tiempo la
izquierda apoyaría a Azaña. Éste
terminó aceptando la presidencia.

El primero de mayo Prieto pronunció uno de los discursos
más importantes de su carrera política. Dijo que la
violencia no consolidaría nada, ni la democracia, ni
el socialismo, ni el
comunismo, que
las quemas de iglesias y enfrentamientos callejeros solo
conducirían al fascismo, y que el joven general Franco
sería candidato natural de las fuerzas armadas que
trataban de implantar una dictadura militar
en España; también habló de las necesidades
económicas de España: reforma agraria, obras
hidráulicas e industrialización.

El 8 de mayo tuvo lugar la elección del nuevo
presidente y a pesar del intento de boicot de los
monárquicos y la CEDA, Azaña se consagró
presidente y le ofreció la jefatura de gobierno a Prieto,
éste la rechazó. El programa mínimo
pedía la nacionalización de las tierras y la
banca el programa
máximo reclamaba la dictadura del
proletariado. Largo caballero se negó a los pedidos del
partido comunista que hablaban de una unificación con los
socialistas.

El 13 de mayo dispararon contra Prieto aunque no se supo con
certeza quien fue, a esta altura tanto socialistas
revolucionarios como derechistas podrían haber disparado
contra él. Azaña confió la jefatura de
gobierno a su fiel amigo Casares Quiroga. Mariano Ruiz Funes,
ministro de agricultura,
intervenía entre los campesinos y la Guardia Nacional para
evitar enfrentamientos, los terratenientes protestaban acusando
al gobierno de legalizar el robo.

El compromiso del Frente Popular de devolver el empleo a todos
los trabajadores despedidos por sus actividades políticas
y sindicales generó serios problemas. En España, al
igual que en el resto del mundo, se aceptaba cierto grado de
socialización, con tal que las industrias
intervenidas fueran aquellas que estaban al borde de la
bancarrota.

Marcelino Domingo, ministro de Instrucción
Pública, reestableció la coeducación y
reanudó el programa de construcción de
escuelas.

El problema clerical inevitablemente se presentó en
relación a las escuelas, los conservadores se
oponían a la coeducación y aceptaron de mala gana
el programa de construcción de escuelas, en la iglesia y el
gobierno estaban ansiosos por evitar un resurgimiento de las
pasiones anticlericales de 1931.

Personalidades eminentes ajenas al gobierno usaron su
influencia para mantener la paz civil. El doctor Marañon
condenó a las derechas por haber identificado el
conservadurismo con la defensa de todos los intereses creados
durante los dos años que ocuparon el poder.
Amonestó a las izquierdas por el tono antinacional de su
propaganda, e
indirectamente se refirió a la glorificación de la
unión soviética. Advirtió a los
españoles en general que las reformas del gobierno de
Azaña eran absolutamente necesarias para la
modernización de España. Predijo que si el gobierno
Azaña era derrotado, toda España quedaría
dividida entre reacción y marxismo.
Miguel Maura también se adelantó con sus
críticas y propuestas.

Las izquierdas habían elevado a Azaña al poder
pero no para fortalecer su cargo, sino para apartar de la
política activa al más capacitado dirigente
burgués.

El gobierno de Casares, y cualquier otro gobierno republicano
que le sucediera, existirían tan solo gracias al apoyo de
los comunistas y socialistas en las cortes. Mientras los
Marañon, los Prietos y los Maura hablaban de acabar con
huelgas inútiles, los exaltados tanto de la derecha como
de la izquierda se arremangaban las camisas. Cuando el
débil gobierno parlamentario burgués hubiera
quedado desacreditado, el futuro seria de ellos.

Bibliografía

 

 

 

 

Autor:

Laura Avila

Partes: 1, 2
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente 

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter